miércoles, 30 de abril de 2014

Semillas campesinas


Otro interesante evento para este sábado día 3 en Villena. 
Se trata de una Jornada en defensa de las semillas campesinas, organizada por la Plataforma por la soberanía alimentaría en conmemoración del dia de la Lucha Campesina, que tuvo lugar el pasado 17 de abril como cada año.


viernes, 25 de abril de 2014

Nuevo sorteo de cesta ecológica de primavera


En AYCE hemos preparado un obsequio primaveral de lo mas rico


Por tan solo un donativo de 1 .- euro destinado a la sostenibilidad de nuestra asociación, os proponemos una cesta de primavera de productos ecológicos donde podreis encontar articulos de lo mas rico

viernes, 18 de abril de 2014

España, tercer país europeo que más agrotóxicos utiliza



Piden que en España, tercer país europeo que más agrotóxicos utiliza para el cultivo de alimentos, se tomen medidas para restringir su uso

 

 

España es el tercer país europeo con mayor consumo de pesticidas

España es, tras Francia e Italia, el país europeo con mayor consumo de pesticidas, lo que repercute en “cientos de miles de fallecidos, contaminación de aguas y suelos y pérdida de biodiversidad” según Carlos de Prada, responsable del área de Toxicidad Ambiental de la Fundación Vivo Sano (FVS).

Esta fundación ha presentado junto al Fondo para la Defensa de la Salud Ambiental (FODESAM), un detallado informe de 68 páginas en el que propone al Gobierno una serie de medidas concretas para reducir el uso de pesticidas hasta en un 30 % de aquí a 2020.

España invierte anualmente 600 millones de euros en la compra de 40.000 toneladas de estos principios activos, que “van a parar al medio ambiente” y repercuten especialmente en la salud humana “con enfermedades como Párkinson, cáncer de próstata, linfoma y mieloma múltiple, entre otras”, ha precisado el director de FVS Alfredo Suárez.

Las investigaciones presentadas por FSV y FODESAM han detectado la presencia de residuos de pesticidas en diferentes alimentos consumidos habitualmente en España como por ejemplo en un 44 % de las frutas y hortalizas, en un 65 % de las espinacas y en un 80 % de los tomates y los pepinos.

Un 66 % de los españoles están “bastante o muy preocupados” por este tema, según datos del Eurobarómetro, ya que según ha recordado De Prada “a través de la alimentación todos estamos expuestos” a un problema que puede ser incluso más grave ya que “únicamente se analiza una sustancia y no se examinan los efectos en conjunto”.

Así, en Francia que es el primer país europeo en consumo de pesticidas “se ha visto que el efecto concentrado es cientos de veces mayor que el de un principio activo, por lo que aquí los sistemas de evaluación toxicológica son incompletos”, ha advertido.

El documento, que será remitido ahora a los responsables políticos nacionales a través del Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente, también llegará a las autoridades autonómicas y en especial a las de Andalucía, la región española donde se emplean más pesticidas, aunque “paradójicamente, también es la que más practica la agricultura ecológica”.

El estudio presentado propone tres líneas básicas de actuación: la restricción del uso de pesticidas, la promoción de la investigación y divulgación así como el acceso a la información sobre todo lo relacionado con ellos y el impulso de métodos alternativos de lucha contra las plagas.

De Prada recomienda además poner en marcha un plan de ayudas e incentivos a la agricultura ecológica, gravar la comercialización de pesticidas, ayudar al sector agrario y formar agricultores en métodos no químicos de gestión de plagas.

“Podemos reducir los niveles de toxicidad a ese 30 %, porque otros países como Dinamarca y Holanda ya lo han hecho”, ha insistido, “y no debemos escudarnos en que estamos dentro de los límites legales, porque eso no significa que no generen riesgos”.

La iniciativa de estas organizaciones se enmarca dentro de la “Semana sin pesticidas”, que conmemoran 27 países de todo el mundo y cuenta con el apoyo de numerosas entidades tanto nacionales como internacionales. EFE



viernes, 11 de abril de 2014

Se calcula que nuestros campos han perdido el 90% de las variedades de cultivos para la alimentación


El biólogo José María Egea alerta de que la actual soberanía alimentaria está provocando un éxodo de millones de familias campesinas

 

 

J.VALLÉS ­

Muchas gente pequeña, en lugares pequeños, haciendo cosas pequeñas pueden cambiar el mundo». 

 Esta cita del escritor uruguayo Eduardo Galeano se ha convertido en una arenga en las Jornadas de Agroecología y Ecodesarrollo de la Región de Murcia, que arrancaron ayer y se extenderán hasta el 7 de febrero. Y es que este foro pretende ser una llamada de atención sobre la insostenibilidad del actual sistema agroalimentario, poniendo sobre la mesa alternativas a las formas de hacer que impone el mercado globalizado.

En su sexta edición, las jornadas vuelven a incidir en las consecuencias de la agricultura industrial sobre la salud humana y el medio ambiente. El catedrático de Botánica José María Egea, que es el coordinador de la Red de Agroecología de la Región (RAERM), organizadora de este evento, alerta, a modo de ejemplo, sobre las múltiples investigaciones que apuntan a los pesticidas como factores de riesgo para la aparición de determinadas enfermedades, como el cáncer o el Alzheimer. «Aunque las frutas y verduras que encontramos en nuestros mercados han sido sometidas a un estricto control sanitario, siempre queda en ellas algún trazo tóxico. Puede que estas sustancias nocivas, al presentarse en cantidades mínimas en un determinado producto, sean aptas para el consumo humano, ya que por sí solas no suponen un riesgo para la salud del consumidor. Sin embargo, el problema viene cuando vamos acumulando en nuestro organismo todas esas pequeñas dosis», indica.
Sobre esta realidad habló ayer Odile Fernández, una médico de familia a la que hace cuatro años se le diagnosticó un avanzado cáncer de ovario, enfermedad que ha conseguido vencer, sin dejar de lado los tratamientos habituales, mediante una alimentación más saludable, huyendo de productos refinados, manipulados industrialmente o con gran contenido de tóxicos.

Otro de los temas principales de estas jornadas es la soberanía alimentaria, un modelo que, según Egea, ha llevado a la «destrucción de los medios de vida rurales y al éxodo de millones de familias campesinas en todo el mundo». En este sentido, el botánico critica el actual monopolio de las semillas, que ha dejado de ser un bien común para convertirse en propiedad intelectual, un mercado controlado por apenas cinco multinacionales de la industria biotecnológica.

«Se calcula que en el mundo han desaparecido el 90% de las variedades de plantas cultivadas para la alimentación. Hemos perdido un extraordinario patrimonio genético», comenta.

Agricultores en desventaja
Asímismo, indica que por esta situación, la agricultura está dejando de ser rentable para los pequeños agricultores, quienes tienen que pagar altos royalties para poder cultivar estas semillas patentadas. «A esto hay que sumar que los agricultores están recibiendo muy poco dinero por sus productos, aunque éstos después lleguen al mercado mucho más elevados, lo que repercute en la pérdida en la calidad de vida de estos profesionales. El problema es el alto margen que se quedan las grandes cadenas de distribución».

Todo ello, según el experto, está provocando un despoblamiento masivo de los territorios rurales. Se calcula que el 60% de la humanidad vivirá en ciudades en el año 2030, lo que conlleva, como en el caso de Murcia, que estemos hormigonando nuestra huerta para construir viviendas. Si dejamos el campo vacío, ¿quién va a producir los alimentos que necesitamos para sobrevivir?», indica.
Ante esta situación de insostenibilidad, Egea señala que es «urgente y necesario» poner en marcha modelos agroecológicos de producción y consumo de alimentos, que estén en armonía con los recursos naturales y culturales, que no atenten contra la salud humana y nuestro entorno y que contribuyan al desarrollo sostenible en el medio rural y que se devuelva a los ciudadanos el control no solo de la soberanía alimentaria, sino también de la soberanía tecnológica y energética».
Aunque estas propuesta, a priori, pueden resultar utópicas, en las jornadas se va a demostrar que es posible el cambio. En el encuentro participan un nutrido grupo de expertos procedentes de distintos ámbitos -desde la sociología hasta la arquitectura, la economía, la educación o la gastronomía– para compartir sus propuestas para diseñar un nuevo sistema agroalimentario. Se han organizado un total de diez mesas redondas en las cuales se defenderá la recuperación de variedades locales, la creación de bancos de semillas, la venta de productos en canales cortos de comercialización, la recuperación de áreas agrícolas en entornos urbanos y la inclusión de temas sobre soberanía alimentaria en los planes de estudio de la Educación Primaria. (...)

http://www.laopiniondemurcia.es/especiales/educacion/2014/01/campos-han-perdido-90-variedades-cultivos-n304_16_8583.html


jueves, 3 de abril de 2014

La Comunidad prepara un plan a 25 años para la explotación masiva de minas y canteras


 El borrador de Directrices de los Recursos Minerales da prioridad a esta industria sobre cualquier otro uso del territorio. ANSE denuncia que se favorece al sector minero frente a los intereses generales


Si os fijais un poco, vereis que en los alrededores de Murcia capital... ni una.
Curioso, que sean otros lo que se jod...
Si mirais la fecha, este enlace tiene fecha de marzo de 2013... hace un año de esto...


El Gobierno regional apuesta claramente por la industria minera, una actividad económica que planea proteger e impulsar mediante una nueva normativa que tendría una vigencia de 25 años y que favorece la explotación de las canteras por encima de cualquier otro uso del territorio. Las Directrices y Plan de Ordenación Territorial de los Recursos Minerales de la Región, un borrador de trabajo al que ha tenido acceso ‘La Verdad’ y que se está analizando en diferentes departamentos de la Administración regional, identifican una superficie de casi 35.000 hectáreas con yacimientos susceptibles de ser aprovechados, aunque el documento no evalúa la demanda de los recursos mineros ni cuantifica las reservas (...) Laverdad.es